Bueno, la actividad que hemos hecho ha sido divertidísima para ellos y súper fácil para mí.
¿Qué necesitas?
Pintura de dedos casera… y comestible (Pincha aquí para la receta)
Rodillos de distintas formas (en papelerías y jugueterías, approx. 2€ un paquete de 3 ó4)
Papel continuo (este es de IKEA)
Blisters de verduras sin agujeritos (para usar como paleta)
Pintura comestible lista para usar
Pues la mecánica es bien fácil, mojar los rodillos con formas en la pintura y descubrir las formas que hacen sobre el papel.

Se lo han pasado en grande haciendo esto, la próxima vez además probaremos a jugar con esponjas, igual las corto en formitas para usarlas como sellos… ¡Seguiremos informando!




Por cierto, la pintura se quitó perfectamente de la ropa, pero la próxima vez seré más prudente y les pondré ropa vieja por si acaso no se quitara de otros tejidos.